Es posible que SoHo me demande por fusilar sin permiso está página escrita por el novelista Antonio García, el de Recursos Humanos y Su casa es mi casa, en ella, Antonio, hace el primer tributo por Cerati. La fusilo porque está llena de humor negro, de salidas inteligentes y sobre todo porque es justa. Me hubiera gustado haberla escrito para empezar a pagar mis deudas con el músico argentino. Los dejo entonces con:
Creo que Arjona tiene éxito
y llena estadios porque, en general, la calidad intelectual y artística tiende
a ser un asunto minoritario. Por eso, verdaderos músicos como Charly García y
Jorge Drexler no tienen tanta acogida entre las masas como Arjona, Juanes y
Luis Miguel. Algunos más mediáticos como Cerati o Calamaro tampoco lograrían
llenar nueve estadios en Argentina, como lo hizo el bardo (¿el burdo)
guatemalteco. Ese fenómeno es análogo, en literatura, a que Paulo Coelho venda
más que Mario Bellatin o, para poner un caso colombiano, que Sin tetas no hay paraíso
venda mil veces más que Primero estaba el mar. Ortega y Gasset decía, no sin
cierta razón, que cuando muchos están de acuerdo es para una idiotez o una
bellaquería. El verdadero artista con grandes ventas es, si miramos las
estadísticas, más escaso.
LA PUJA POR CERATI
Por. Antonio García Angel
El 15 de mayo de 2010, luego
de la presentación de Fuerza Natural en Caracas, Cerati fue víctima de un
accidente cerebrovascular del que aún no se recupera. Desde entonces, y durante
todo este tiempo, la evolución de su cuadro clínico es una de mis angustias
cotidianas. Las canciones de Soda Stereo y Cerati conforman buena parte de mi
banda sonora vital. Como yo, millones de personas crecieron y crecen al compás
de la guitarra, las letras y la voz de este músico inmenso que irrumpió en los
ochenta con su corte tipo The Cure y sus melodías vanguardistas, y se quedó con
nosotros durante los restantes 15 discos de Soda y 11 discos más que realizó
solo y en compañía de otros. El pronóstico de su salud, aunque esperanzador,
sigue siendo complicado.
Existe una página de
Facebook, creada en el momento más crítico del músico argentino, llamada
"Dios, déjanos a Cerati y te mandamos a Arjona", la cual para el
momento en que escribo frisa los 100.000 miembros. Es una iniciativa loable,
pero carece de toda lógica: Dios no es tan pendejo, no se va a dejar meter
semejante gol. Es como cambiar una mansión a orillas de la Costa Azul por una
cagada de perro en la playa.
Ahora, saliendo de
generalidades y entrando en materia, las letras de Arjona son un verdadero
desastre. Son cursis (aunque querer olvidarte sea mi filosofía/ te llevo pegada
a mí como una calcomanía), ingenuas (Ayúdame, Freud), están llenas de lugares
comunes (bailo al son que me toca la vida/ soy medio loco y suicida), obvias (a
veces soy frío como invierno o tú, delicada como porcelana), absurdas (será
porque no me gusta la tapicería que creo en tu desnudez) y tienen unos ribetes
barrocos (salté de la catapulta de tu quijada después de echarme un chapuzón
entre tus labios) que las hacen insufribles. Cuando lo oigo, imagino muebles
Luis XV de plástico, french poodles disecados y chanclas de peluche azul
turquesa. ¡Y las rimas! No hay rimas más infantiles y elementales que las
suyas. Si agarramos al tipo que redacta las esquelas de Timoteo y le hacemos
una lobotomía, aún sería mejor que Arjona; comparado con él sería Dante, sería
Shakespeare.
Pero lo que más me fastidia
de Arjona quizá es su mal disimulado machismo. Su canción-homenaje Mujeres las
reduce a meras musas tontas que apenas sirven de inspiración a los hombres,
quienes son los verdaderos capaces e inteligentes (¿qué hubiera pintado Picasso?
/ ¿qué hubiera escrito Neruda). Y tiene una obsesión enfermiza con la
virginidad femenina (También es mi primera vez o una que se llama Abarrotería
de amor). Agréguese a eso su seudopornografía repleta de metáforas
desafortunadas y tenemos un insulto viviente a las mujeres que pretende
cortejar y alagar con sus letras.
Solo faltaría reseñar la
parte musical: ese rockcito descafeinado, microfiltrado y pasteurizado, esas
baladuchas desteñidas, esa voz de jinglero barato. Y la cereza que corona el meloso
postre arjonesco: la pinta de galán calentano sensible, la mirada ruda y el
pecho descubierto.
Por eso propongo que se
modifique la iniciativa de marras, que subamos la oferta: "Dios, déjanos a
Cerati y te mandamos a Arjona, Luis Miguel, Juanes, Cristian Castro, Talía,
Enrique Iglesias, Christina Aguilera, Britney Spears, Maná, Gloria Estefan,
Alejandro Fernández, Laura Pausini, Coti, Álex Ubago, Nek, Mariah Carey,
Tiziano Ferro, Eros Ramazzotti, Il Divo y Daddy Yankee".
De todas maneras quedaríamos
debiéndole, pero la oferta es un poco menos chichipata.
ufff, excelente gracias por fusilarla y compartirla con nosotros.Un abrazo
ResponderEliminarVes,hermano?no sólo yo lo digo,si es que el de la isquemia parece ese pelmazo guatemaluco!Abrazo.
ResponderEliminarlos verdaderos artistas no se cambian y a demas no se venden porque acabaria el dia y llegaria la noche.
ResponderEliminarJUAN CARLOS NARANJO GOMEZ