12 años sin Orlando Sierra Hernández
(1959-2002)
Por Gloria Luz Ángel Echeverri*
"Hablar de Orlando Sierra
Hernández y de su obra es difícil. Primero, porque se ha convertido en un ícono
del valor civil y del compromiso social de los periodistas. El caso de su
asesinato ha sido un ejemplo de la impunidad que reina en el país. Segundo,
porque sólo vieron la luz tres de sus libros de poesía y uno quedó inédito.
Además, de sus cinco novelas, sólo una fue editada en Francia, pero es como si
no hubiera sido publicada porque no llegó a Colombia.
Era un ser que tenía el alma
templada para el periodismo de riesgo, pero también para la poesía y el
disfrute de lo cotidiano; ese líder de masas que los manizaleños hoy tanto
extrañan por su palabra comprometida con el bien común, por la brillantez de su
lenguaje y su obsesión por develar verdades. Escribía semanalmente una columna
titulada “Punto de encuentro” donde su interés se centraba en la lucha contra
la corrupción y en la demanda porque se dieran mayores espacios de
participación política en Manizales y Caldas. Su carácter rebelde, el interés
por la ciudad y por las causas perdidas, el apego a la verdad y a la libertad,
el amor a la poesía, esa inquietud que lo llevaba a cuestionarse siempre a sí
mismo y a los demás, y su gran sed por conocer lo que decían los escritores
universales, lo acompañaron durante sus 42 años.